Se han hecho públicos recientemente dos nuevos informes sobre el mercado del automóvil que resultan interesantes para analizar las tendencias y preferencias de los clientes a la hora de adquirir vehículos y en especial los usados y de ocasión.
Según “El observador del automóvil 2010” presentado por Banco Cetelem durante el XIX Congreso Nacional de la Distribución de Automoción (Faconauto) se refleja la tendencia para este próximo año 2011 de seguir apretándose el cinturón por la situación de crisis, lo que se traduce en que el 73% de los españoles opina que la adquisición de un automóvil de bajo coste es la postura más sensata. El 39% de los encuestados estarían dispuestos a adquirir dichos vehículos durante el próximo ejercicio. Comienza a surgir con fuerza el concepto de “low Cost” en el sector de la automoción. Es por ello que el mercado del vehículo de ocasión a sentido con menor virulencia los efectos de la crisis.
Por otro lado la consultora Capgemini ha realizado un informe anual de ventas de vehículos en Internet, el “Informe anual Cars Online”, con entrevistas a más de 8000 consumidores de 8 países. Aunque España no se encuentra entre ellos, es un estudio extrapolable a cualquier país con un plataforma online consolidada como puede ser el caso de España. Se ha detectado que más del 40% de los automovilistas estarían dispuestos a realizar el proceso completo de compra de un coche por Internet y no solo usar la red como motor de búsqueda de información y ofertas.
Si observamos en perspectiva estos informes, podemos apreciar que la tendencia de acudir a Internet para anunciar los vehículos se está convirtiendo cada vez más en pieza clave de éxito para cualquier particular o profesional. El futuro sin lugar a duda pasa por Internet. Aunque en España todavía la tendencia esta por afianzarse, si se puede aplicar al sector de la compra y venta de vehículos de ocasión donde como se publico recientemente, el 62% de las operaciones se realizaban entre particulares. Estos mayoritariamente utilizaban las plataformas on-line para anunciar sus vehículos. Se les plantea entonces a los profesionales un importante reto. El dominio y afianzamiento en una plataforma que el particular controla desde hace tiempo. Adicionalmente deben recobrar una imagen en muchos casos negativa de su función. No deja de ser curioso que se confíe en muchas ocasiones más en el particular que en el profesional, aunque los datos confirman que la satisfacción de los clientes suele ser alta.
El profesional tiene las herramientas disponibles para que se decante la balanza a su favor. Todo está en sus manos para subirse al carro de lo que está ocurriendo en otros países. Dispone de información de las tendencias de mercado, plataformas de publicidad en Internet más avanzadas que las de los particulares y posibilidad de certificación para garantizar la calidad de su producto. Todo dependerá de adelantarse a lo que está por venir y estar preparado.
Fuentes: Europa Press, Capgemini y Cetelem.
